CATEDRAL DE SAN SALVADOR DE OVIEDO

“Quién va a Santiago y no al Salvador, visita a su criado pero no a su señor” (antiguo refrán popular).

 

   Describir toda la arquitectura de una catedral es una labor harto difícil, no solo por la complicación de la materia en sí, sino porque a lo largo de los siglos estos edificios han ido sufriendo tantas modificaciones que la exposición de todas ellas requiere conocimientos más exhaustivos que los de andar por casa que pueda tener yo. Por eso me he centrado en ciertos detalles de la catedral de Oviedo y que esbozo a golpe de pincelada siguiendo las fotos sacadas por mi misma.

   El primer templo erigido en el solar donde hoy esta ubicada la Catedral de Oviedo data del siglo VIII, cuando reinaba el monarca asturiano Fruela I. Casi destruido por un ataque musulmán a finales de ese mismo siglo, pocas décadas después (sobre el primer cuarto de del siglo IX) fue el rey Alfonso II el Casto, el que mandó erigir un complejo religioso-palatino, en el que se incluía la Catedral de San Salvador.
      La construcción prerrománica de Alfonso II fue transformándose a lo largo de los siglos. Uno de los cambios es la TORRE ROMÁNICA o TORRE VIEJA: sobre base prerrománica de sillarejo se levantaron dos pisos de sillería románica. El inferior tiene un vano de medio punto rodeado por un arco ciego; el superior, cubierto por una bóveda esquifada, tiene dos vanos rodeados por arquivoltas de medio punto sobre parejas de columnas. Especial atención a los preciosos capiteles decorados con aves, entrelazos y sogueados.

, 

   Durante el siglo XIV comienza la construcción del templo gótico que hoy podemos admirar, demoliéndose la anterior iglesia románica, aunque aún se conservan ciertas partes. Se trata de la construcción más importante del gótico asturiano, aunque como tardo siglos en acabar de construirse, aparecen las nuevas influencias renacentistas. Hay que tener en cuenta que los trabajos no terminarían hasta el siglo XVI, pero donde se realizaron con mayor intensidad es en el siglo XV, por lo que predomina el gótico florido o flamígero.

 

   LA TORRE MERIDIONAL se finalizó en el siglo XVI con unas formas gótico flamígeras que recogen las experiencias de Juan de Colonia en las flechas caladas de la Catedral de Burgos.

 

 

   EL PÓRTICO esta formado por tres arcos que se corresponden con las tres naves del templo. La portada que se muestra en la imagen es la de la derecha del monumento y permanece cerrada, pudiendo contemplarse unas magníficas puertas talladas en el siglo XVIII con madera de nogal. En una de las hojas se pude observar la imagen de San Salvador y en la otra la de Santa Eulalia de Mérida.
El muro y las arquivoltas, así como la parte del arco central están decoradas con nichos y peanas para colocar unas